Este juego trabaja la composición de un número. En él se alterna la representación de las cantidades, a través de dibujos (zanahorias), y de sus cifras para afianzar la conexión cifra-cantidad.
En este juego se practica la composición de los números. El jugador no sabe cuantos dinosaurios hay, pero sí las partes en que se ha descompuesto. Se juntan esas partes, se cuentan y así se averigua el número.
En este juego se trabaja la descomposición de números. En la buhardilla aparece el número que se ha de descomponer y, en cada una de las ventanas, se han de realizar descomposiciones